¿Qué es cierre patronal?

Un cierre patronal, también conocido como lockout, es una medida en la que un empleador impide que sus empleados trabajen, generalmente como respuesta a una disputa laboral o negociaciones colectivas.

Durante un cierre patronal, los empleados no pueden acceder a su lugar de trabajo, por lo que no reciben su salario ni pueden llevar a cabo sus funciones laborales. Esta medida suele ser utilizada por los empleadores para presionar a los empleados a aceptar ciertas condiciones laborales o para darles mayor poder en las negociaciones colectivas.

Los cierres patronales pueden tener un impacto significativo en los trabajadores, ya que pueden resultar en la pérdida de ingresos y en la incertidumbre sobre el futuro laboral. En algunos casos, los trabajadores pueden ser reemplazados permanentemente si no llegan a un acuerdo con el empleador.

Es importante señalar que los cierres patronales están regulados por la ley y que los empleadores no pueden llevar a cabo esta medida de manera arbitraria. Los trabajadores afectados por un cierre patronal pueden tener derecho a recibir una compensación o buscar medios legales para proteger sus derechos laborales.